Por Sara Aceves Giacinti. Coach Personal y Socia Fundadora de GIA.

Muchas veces me he hecho la pregunta ¿Mi vida importa? A lo largo del tiempo me doy cuenta que somos parte de ese plan perfecto del Universo donde a cada segundo experimentamos y generamos el llamado “efecto mariposa” y si, no sólo me importa a mí y a ti, sino al mundo entero. Hacer que mi experiencia sea la mejor que podría llegar a ser es algo que le debo y le debes a todo lo que existe.

¿Tu tiempo importa? Cada instante constituye una oportunidad para aportar verdadera riqueza y valor.

¿Tu perspectiva importa? Enfocándote en lo positivo haces que todo en la vida resulte más positivo y más pleno.

¿Tus acciones importan? Lo que haces, modifica las cosas, y tú cuentas con la habilidad, real y concreta, de hacer que el mundo sea un lugar cada vez mejor.

¿Tu propósito importa? Haz aquello que sabes es lo correcto, y que es lo correcto para ti, no sólo lo que resulta fácil y conveniente.

Siente tu profunda y poderosa conexión con todo lo que es, y reconoce en todo momento todo lo que tú realmente importas. Vive como si tu vida importara, porque de muchas maneras, y a niveles mucho más allá de lo que puedes llegar a imaginar, absolutamente importa.

Cuando llegan a tu vida cosas buenas y positivas, aprovecha la oportunidad para hacer algo bueno con ellas. Y cuando lo que suceda en tu vida sean cosas negativas y decepcionantes, utilízalas también como una oportunidad para generar algo positivo a partir de ellas.

Cada momento constituye una oportunidad para generar nuevas cosas buenas.

Cada situación te brinda la posibilidad de ser realmente valioso.En lugar de sentirte frustrado, se creativo. En lugar de sentirte desinteresado o engreído, siéntete inspirado.

La vida es como es, y como sea que pueda ser, tú puedes mejorarla. El sol brilla durante un tiempo, y luego las tormentas se abaten sobre la costa, y a través de todo ello puedes continuar generando nuevo y verdadero valor.

No tienes por qué preocuparte por lo que podría llegar a suceder, o por lo que podrías ganar o perder. Opta en cambio por enfocar tu energía en lograr lo mejor de lo que sea que pudiera ser.

Sea lo que sea que sea, es también una oportunidad para generar nuevas cosas buenas. Aférrate a cada oportunidad que te ofrezca cada día, con entusiasmo y amor, y siente su plenitud acompañándote a donde sea que vayas.

"Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos".

Por Sara Aceves Giacinti. Coach Personal y Socia Fundadora de GIA.

Contacta con TISOC por Whatsapp