Por Pedro Palao Pons, Master Coach grado Experto TISOC

Y llega un día, o no, en el que te preguntas: ¿qué quiero hacer?¿en qué soy bueno? ¿qué se hacer? Y sin saberlo, estamos poniendo sobre la mesa vocación, talento y competencias.

Ahora bien ¿qué se nos exige ahí fuera? Lamentablemente hay quien solo espera nuestra competencia, tanto le da el talento y menos todavía la vocación. Craso error ¿Para qué quieres ser supercompetente si no disfrutas con esa acción? ¿Para qué si no sabes fluir con lo que haces porque tu talento está en otro lugar?

Los diplomas académicos no cabrán en un ataúd cuando marches, pero la experiencia y la satisfacción por lo vivido sí.

Fórmate, aprende, disfruta, descubre, actualiza tus competencias, pero al hacerlo, pregúntate si sirven para encauzar tu vocación y desarrollar tus talentos y ayudarte a fluir o solo para tener una línea más en tu hoja de vida/currículo.

Fluye, hoy es irrepetible.

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