Por Dionisio Contreras Casado
Si le pidieran opinión, para su empresa:¿Qué tipo de metodología de aprendizaje elegiría usted, formación en la naturaleza (Outdoor Training) o formación en un aula (Indoor Training)?
Cada vez más organizaciones necesitan formar a sus directivos y gerentes en competencias emocionales, tales como la comunicación, el trabajo en equipo, la resolución de conflictos o la gestión del tiempo, competencias y habilidades de importancia capital para toda la empresa, no solamente para el equipo directivo.
Del mismo modo, también, cada día es más frecuente que gerentes y directivos de numerosas empresas, participen en programas de formación, que tienen como objetivo el entrenamiento emocional, y todo ello realizado al “aire libre”, lo que se ha dado en llamar “Outdoor training”. Muchos responsables de Recursos Humanos, superan el recelo de pensar que estas actividades pueden generar en los participantes una sensación de peligro o displacer emocional, y contratan consultorías especializadas en este tipo de servicios.
Se trata de una metodología de formación y aprendizaje, recomendada para conseguir altos niveles de desarrollo y crecimiento emocional, su método es la experimentación y su aula, el medio natural, si bien el análisis de la experimentación se trabaje en un aula. Una de sus características es que permite eliminar los conflictos que a diario nos enfrentamos en el entorno laboral. Quizá uno de los grandes valores de esta metodología es que actúa sobre dimensiones y competencias personales, por lo que permite al participante mejorar sus habilidades emocionales.
Reinoso (2006), destaca que el aprendizaje fuera del aula: “promueve la experimentación con la resolución de problemas, se `empuja´ al conocimiento del grupo y a la confianza, los participantes experimentan emociones reales no pudiendo esconderlas o disimularlas, los aspectos físicos de la actividad provocan el compromiso activo en el aprendizaje y, como consecuencia de hacer las actividades en un contexto diferente, las personas rompen con mayor facilidad con antiguos modelos de forma de pensar”.
Diferentes investigaciones coinciden en que la transmisión oral de algunos conceptos, sobre todo los referidos a competencias emocionales, permiten un nivel promedio de que se recuerden de un 15% de lo expuesto. Interminables ponencias, conferencistas soporíferos, papelógrafos llenos de gráficos o sesiones inacabables de diapositivas hechas en powerpoint han sido los ingredientes esenciales de la formación en la empresa. Tanto tiempo y tanto dinero para tan escasos resultados: es muy habitual que los colaboradores regresen al trabajo sin haber sido “tocados”, y evidentemente gran parte de ellos terminan haciendo lo mismo que siempre habían hecho, reforzando así su hábito de comportamiento, y arrinconan los contenidos que intentaron meterle en la cabeza en los días del curso.
Es sabido que un directivo que ha desarrollado exitosamente un gran abanico de habilidades emocionales, va a poder ayudar a que su equipo piense de un modo más creativo, contribuirá a una comunicación fluida, y los conflictos que se den en su equipo serán menos en número, y siempre solucionables.
Parece claro que la vivencia de situaciones “representadas” ofrece un alto porcentaje de aprendizaje efectivo, mucho más efectivo que la lectura de un artículo o escuchar una conferencia, ya que las conclusiones extraídas de las actividades en plena naturaleza, o en un contexto de experimentación, son fácilmente extrapolables a las dificultades enfrentadas en el día a día de la empresa.
En un contexto en el que la tecnología puede ser comprada por cualquiera que tenga el dinero suficiente para hacerlo, la verdadera transformación empresarial se da en el pensamiento y en las actitudes de sus líderes, y el éxito empresarial depende de la capacidad del líder para movilizar a su equipo en torno al logro. Aquí cobra importancia el sistema de formación “Outdoor training”.
Una desventaja es que es algo más caro que la formación en un aula; y algo a tener en cuenta es que no todo lo que se ofrece es “formación outdoor”, sino una versión simplista, que hacen de esto, algunas empresas de tiempo libre.
Dionisio Contreras Casado Educador Social. Experto en Drogodependencias. Formador de Inteligencia Emocional.