Por Iñaki Posadas
“El mayor peligro para la mayoría de nosotros no es apuntar demasiado alto y no conseguir lo que uno quiere, sino apuntar demasiado bajo… y lograrlo”
Miguel Ángel
Todo el mundo nace único e irrepetible. Pero a través de los años, trabajamos muy duro y no dejamos de esforzarnos para ser como todos los demás.
Hoy en día la sociedad celebra tanto la mediocridad que no se necesita mucho para situarse por encima del resto.
¿Para qué conformarse con ser sólo “suficientemente buenos”, si podemos ser extraordinarios? Ser “suficientemente bueno” hace tiempo que ha dejado de ser suficiente. En el mundo actual estar “en la media” es el mejor sitio para no ser nadie, o para ser un perdedor… y si estás leyendo esto es porque deduzco que no quieres ser ninguna de las dos cosas…
¿Qué hace falta para ganar un partido de futbol? ¿O para ganar una carrera de fórmula 1? Para triunfar no hace falta ser perfecto o infinitamente mejor que tus rivales, tan sólo hace falta ser “un poco mejor”, no es necesario una gran goleada o doblar al contrario… si metes un gol más, si eres una milésima más rápido en cada vuelta, la victoria es tuya… es suficiente. Y en la vida las cosas no son muy diferentes… la única diferencia es que a menudo, para el segundo no hay medalla de plata.
¿Qué ocurre si quedas segundo en una entrevista de trabajo? ¿Qué ocurre si la última persona admitida en una oposición saca una décima más que tú? En la vida por lo general, quedar segundo significa ser el primero de los perdedores.
Por eso yo te pregunto… ¿Te crees capaz de conseguir marcar ese gol adicional? ¿De ser esa milésima de segundo más rápido? Y sobre todo… ¿Estás dispuesto a asumir el esfuerzo que conlleva el ser capaz de lograrlo?
Sólo tú puedes saber quién quieres llegar a ser, lo alto que quieres llegar así como el esfuerzo que estás dispuesto a realizar para conseguirlo. No existen fórmulas mágicas, trucos o atajos, tan sólo voluntad, esfuerzo, dedicación y trabajo. Si realmente sabes dónde quieres llegar, nadie tiene el derecho a impedírtelo, pero tienes que estar dispuesto a dar los pasos necesarios para ello.
Todas las personas tenemos la capacidad de decidir hasta dónde queremos llegar en nuestro compromiso con nosotras mismas.
Huye de la mediocridad, no seas uno más de esa masa de gente que piensa solamente en exigir sus derechos y sin embargo no siente ninguna obligación de hacer algo para ganárselos. Caer en la mediocridad es caer en el conformismo, resignarse a vivir a medio gas.
Disfruta del desafío que te plantea el tener la vida por delante y no te conformes con menos de lo que puedes llegar a ser, ¡¡ Cada día es una nueva oportunidad para crecer y superarte!! Y está en tu mano aprovecharla, o dejarla marchar…
En el mundo en el que vivimos hoy en día, tenemos la obligación, que no la oportunidad, de poder dar un paso al frente y asumir la responsabilidad de hacer que las cosas sucedan, las oportunidades y el éxito es muy difícil que vengan a buscarte a la puerta de tu casa.
Pero no sólo tenemos esa obligación, también hemos nacido con la capacidad suficiente para dar ese paso adicional que hace falta, ya que afortunadamente la naturaleza nos ha dotado de los mismos elementos que otros hombres que abandonaron el camino de la mediocridad tuvieron… dos brazos, dos manos, dos piernas, dos ojos y una maravillosa mente para usar, siempre que estemos dispuestos a ello.
La simple posibilidad de plantearse ser grande asusta, ¿verdad? Puedes tener miedo si quieres, nadie va a reprochártelo, pero que ese miedo sea un miedo tremendo a ser mediocre, no a dar un paso al frente y marcar la diferencia.
Sólo se vive una vez, pero si lo haces bien, es más que suficiente
Iñaki Posadas Martínez
Licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Pública de Navarra, Master en Coaching Personal, Ejecutivo y Empresarial por el Instituto Europeo de Estudios Empresariales, Master Coach Grado Experto por The International School of Coaching, Master M.B.A por la escuela de negocios IDE-CESEM, formado en Liderazgo Estratégico por la Nebrija Business School.