Por Pedro Palao Pons, Master Coach grado Experto TISOC

Las cosas salen mal, el proyecto se cae, la previsión se derrumba, el sueño se diluye…

Lo fácil, lo sencillo, es el enfado, la rabia, la tensión. ¿Para qué? ¿Qué utilidad tiene? ¿Cuánto hace que tras un fracaso, fallo o revés, no te preguntas el sentido, el para qué de tu reacción? ¿Has calculado el coste? ¿Y la rentabilidad? ¿Cuánto hace que no paras, miras alrededor y evalúas?

¿Cambiará el mundo tu tensión? ¿Servirá de algo la culpabilización? ¿Será útil el reproche? Sí, puede que libere tu tensión emocional pero… ¿Para qué te sirve eso? ¿Qué viene después? ¿Que harás? ¿Cuál es tu plan de acción?

Solo tenemos una realidad.

Solo una oportunidad.

Solo un momento.

¿Qué prefieres, seguir nadando en las hieles del rencor por algo ya sucedido o remar en la barca de la responsabilidad, para crear un nuevo futuro?

Toma la decisión que quieras o no hagas nada, que también es una forma de hacer, pero sea como fuere, pregúntate ¿para qué?

Por Pedro Palao Pons, Master Coach grado Experto TISOC